Estibalis y la reputación de un país.

El pasado 30 de enero de 2011, comediantes del famoso programa "Top Gear"  lanzaron una fuerte crítica a los mexicanos. En él tuvieron "el gran acierto" de estereotipanos y llamarnos 

"flojos, irresponsables, flatulentos, con sobrepeso, recargados en una valla para dormir, mirando un cactus y con una cobija encima con un hoyo en medio que sirve de abrigo".

Esta situación indignó a muchos y el embajador de México en Reino Unido Eduardo Medina Mora solicitó a la BBC una disculpa pública por considerar que dichos comentarios "sólo sirven para reforzar estereotipos negativos y perpetrar prejuicios en contra de México y su gente" .

Después de haber conseguido la disculpa pública de la Cadena Londinense, Javier Hernández "El Chicharito" lanzó una campaña en contra de la descalificación recibida por los conductores con la siguiente frase: ¨Imagínate despertar y recordar que eres mexicano”, la cual por lo menos nos había levantado el orgullo y recordado lo grande que somos como pueblo. 

Figuras como Javier Hernández "El chicharito", Lorena Ochoa, Ana Gabriela Guevara, Sergio Pitol entre otros muchos, se han encargado de que con su trabajo el nombre de nuestro país trascienda. Otro tanto de millones de mexicanos desde sus trincheras demuestran  día a día que las cosas se obtienen trabajando.


Me permito hacer todas estas referencias para poder dar mi opinión con respecto a  la mexicana que se hizo famosa por haber hecho una huelga de hambre frente a la embajada de Inglaterra: Estibalis Georgina Chávez Guzmán con la finalidad de obtener una invitación a la  Boda del Príncipe Willian con Kate Middelton. A pesar de que en la embajada le explicaron que conseguir una invitación para ella no estaba dentro de las posibilidades (ni dentro de sus funciones) Estibalis continuó llamando la atención de los medios de comunicación hasta que una persona decidió aportarle los recursos necesarios para pagar su boleto de avión.


 A través de las diferentes redes sociales, entre ellas twitter las opiniones se han dividido, unos están a favor de la chica y otros tantos en contra. Los que están a favor están admirados porque consideran que si tiene la voluntad de cumplir sus sueños y que ha sabido manipular a su favor a los medios para conseguir su objetivo. Sin duda alguna apoyo la teoría de que los medios de comunicación son quienes le han dado la oportunidad de ser noticia. Dijeran por ahí, ¿A quién le dan pan que llore?. 


Por el otro lado están los que le piden que se retire de "su sueño". Definitivamente es inadmisible este tipo de conducta que afecta la imagen de todos los mexicanos, en su cuenta de twitter la chica se pregunta que qué es lo que nos ha hecho, que no entiende el por qué de todos los comentarios negativos hacia ella; yo le contestaría: ponernos como vergüenza a nivel mundial. Finalmente darle  las armas a la opinión internacional para volvernos a estereotipar. 


Estibalis hace énfasis en que ella tenía este "sueño" desde hace mucho, pero me pregunto, ¿qué hizo al respecto para cumplirlo?, ¿Por qué en lugar de haber hecho una huelga de hambre en la embajada con tanta anticipación, no ofreció su trabajo o hacer un tipo de voluntariado, o cualquier otra forma de ofrecer algún servicio a cambio de la oportunidad de asistir a la boda real?, finalmente que deje de comer no le beneficia a nadie, incluso ni a ella, habiendo tantas pequeñas cosas que pudo haber ofrecido a los demás, de haber sido así estoy segura que si no le hubiera alcanzado más mexicanos la hubiéramos apoyado.


En entrevista para los medios menciona que:  "de llegar a la boda el esfuerzo habrá valido la pena", yo me pregunto ¿Qué esfuerzo está haciendo ella?, estar en España con viáticos pagados por otra persona es un esfuerzo?, ¿estar pidiéndole a los demás dinero y alojamiento para viajar a otro país es un verdadero esfuerzo?, todo lo ha pedido regalado, ahora, ella menciona haber estado sola en el aeropuerto sin saber qué hacer, todos aquellos que hemos viajado al extranjero y llegamos a lugares donde no conocemos nos encontramos en esa misma situación y la resolvemos,  ¿será válido hacer huelgas de hambre para poder cumplir nuestros caprichos?, porque en mi humilde opinión si la chica fuera una deportista que ha entrenado fuerte durante un periodo y no puede ir a las olimpiadas a representarnos, sin duda alguna la apoyaría, y no solo yo, se que el resto del país lo haría. Pero causar lástimas de la gente, en lugar de ponerse a trabajar y dejarnos con la imagen de que los mexicanos todo queremos regalado, eso si que va a ser muy difícil de olvidar. 


¿Realmente hay una inocencia en cumplir su meta?, cuando al haber mencionado en su cuenta de twitter que donaría sus zapatos y su ropa a la gente con sueños es incorrecto, en mi opinión esto es equipararse a las celebridades de las cuales sus objetos personales adquieren un gran valor para un grupo de fanáticos. Si ella ya se está viendo en esa situación no me parece que su única intención sea, como dice, estar presente en la boda, puesto que esto hace parecer que también está buscando su fama. ¿Cuál es el mensaje para los jóvenes de su edad? 


Muchos mexicanos sabemos trabajar por lo que queremos. Ojalá que cada día seamos más.


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Palabras van... palabras vienen!

            Hace tiempo que empecé con la realización de este blog. Debo confesar que no sabía nada acerca del tema, sin embargo conforme le vas "picando" a las páginas te das cuenta de que no es tan difícil como parece.

Lo complicado es tener material siempre disponible para publicar, cuando no te dedicas de lleno a esto. Este blog comenzó a raíz de una materia de la maestría en donde se nos exigía

entregar las tareas a través de este medio. Sin decirnos "agua va" nos pidieron que en 5 días contáramos con uno. Afortunadamente para mí empezó a ser un medio para comunicarme con el mundo como lo hacen cientos y miles de personas alrededor del planeta. 

Aún con mi gran espíritu emprendedor empecé a dejar de publicar y hacerlo únicamente cuando tenía tiempo. Mi reto ahora es retomar "el teclado", (porque ya no es la pluma) y desarrollar la habilidad de la escritura. ¿Qué me voy a equivocar?, sí y muchas veces.

Sólo espero poder estar siempre a un clic de distancia.

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Museo Nacional de Historia

Museo Nacional de Historia

¿Quieres conocer el Castillo de Chapultepec y no puedes viajar a la Ciudad de México?

       Actualmente CONACULTA en conjunto con el INAH ha puesto a nuestra disposición una herramienta para "visitar" algunos museos de manera virtual, de esta manera será posible realizar recorridos a través de nuestra computadora y conocer algunos lugares destinados a la conservación de la historia.

         En esta ocasión quiero compartir un poco acerca del Castillo de Chapultepec actualmente convertido en el Museo Nacional de Historia. Particularmente he tenido la oportunidad de visitar el museo en un par de ocasiones y puedo decir que el recorrido virtual es muy completo, a excepción de que no muestra el elevador que se encuentra en el castillo el segundo que hubo en México, (el primero fue instalado en Palacio Nacional) ambos adquiridos por Porfirio Díaz.

    En el recorrido podemos observar las habitaciones que ocuparan Carlota,  el mismo Porfirio Díaz, las salas de estar, los pasillos, las colecciones de arte, etc. espero que disfruten este recorrido, para los maestros ojalá puedan compartirlo con sus alumnos y para los que son papás lo compartan con sus hijos. 

/http://www.inah.gob.mx/paseos/museonacional/

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A propósito de Javier Sicilia...

Hasta mi bandeja de entrada del correo electrónico llegó una convocatoria para asistir a una marcha con motivo del reciente asesinato del hijo del poeta Javier Sicilia, como la mayoría de los textos que me llegan y que no considero que son spam decidí leerla en voz alta para compartirla con quien estaba en ese momento conmigo, sin embargo a media carta me detuve, no pude continuar con la lectura, se me quebró la voz. 

Pedí que alguien más continuara leyendo la carta argumentando que  me había quedado "seca" de la garganta. Veía y veía la foto que acompañaba al texto y percibí ese dolor que va más allá de la comprensión del ser humano.   Percibí la impotencia, el sentimiento de tristeza profunda que causa la muerte de un hijo; tal y como lo dice el autor de la carta, "La muerte de un hijo es antinatural, no tiene nombre", para todos aquellos que no les llegó este texto, se los comparto. Creo que en él se refleja claramente lo que sentimos muchos ciudadanos de México, de este país que parece estar condenado a ser gobernado por la impunidad.  

Palabras que tal vez quieran decir todos aquellos que han vivido una tragedia similar.

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Por Agencias

03/04/2011 - 04:00 AM

PROCESO | México, DF.- El brutal asesinato de mi hijo Juan Francisco, de Julio César Romero Jaime, de Luis Antonio Romero Jaime y de Gabriel Anejo Escalera se suma a los de tantos otros muchachos y muchachas que han sido igualmente asesinados a lo largo y ancho del país a causa no sólo de la guerra desatada por el gobierno de Calderón contra el crimen organizado, sino del pudrimiento del corazón que se ha apoderado de la mal llamada “clase política” y de la “clase criminal”, que ha roto sus códigos de honor.

No quiero, en esta carta, hablarles de las virtudes de mi hijo, que eran inmensas, ni de las de los otros muchachos que vi florecer a su lado, estudiando, jugando, amando, creciendo para servir, como tantos otros muchachos, a este país que ustedes han desgarrado. 

      

              

Hablar de ello no serviría más que para conmover lo que ya de por sí conmueve el corazón de la ciudadanía hasta la indignación. No quiero tampoco hablar del dolor de mi familia y de la familia de cada uno de los muchachos destruidos. Para ese dolor no hay palabras –sólo la poesía puede acercarse un poco a él, y ustedes no saben de poesía–. Lo que hoy quiero decirles desde esas vidas mutiladas, desde ese dolor que carece de nombre porque es fruto de lo que no pertenece a la naturaleza –la muerte de un hijo es siempre antinatural y por ello carece de nombre: entonces no se es huérfano ni viudo, se es simple y dolorosamente nada–, desde esas vidas mutiladas, desde ese sufrimiento, desde la indignación que esas muertes han provocado, es simplemente que estamos hasta la madre. 

Estamos hasta la madre de ustedes, políticos –y cuando digo políticos no me refiero a ninguno en particular, sino a una buena parte de ustedes, incluyendo a quienes componen los partidos–, porque en sus luchas por el poder han desgarrado el tejido de la nación, porque en medio de esta guerra mal planteada, mal hecha, mal dirigida, de esta guerra que ha puesto al país en estado de emergencia, han sido incapaces –a causa de sus mezquindades, de sus pugnas, de su miserable grilla, de su lucha por el poder– de crear los consensos que la nación necesita para encontrar la unidad sin la cual este país no tendrá salida; estamos hasta la madre, porque la corrupción de las instituciones judiciales genera la complicidad con el crimen y la impunidad para cometerlo; porque, en medio de esa corrupción que muestra el fracaso del Estado, cada ciudadano de este país ha sido reducido a lo que el filósofo Giorgio Agamben llamó, con palabra griega, zoe: la vida no protegida, la vida de un animal, de un ser que puede ser violentado, secuestrado, vejado y asesinado impunemente; estamos hasta la madre porque sólo tienen imaginación para la violencia, para las armas, para el insulto y, con ello, un profundo desprecio por la educación, la cultura y las oportunidades de trabajo honrado y bueno, que es lo que hace a las buenas naciones; estamos hasta la madre porque esa corta imaginación está permitiendo que nuestros muchachos, nuestros hijos, no sólo sean asesinados sino, después, criminalizados, vueltos falsamente culpables para satisfacer el ánimo de esa imaginación; estamos hasta la madre porque otra parte de nuestros muchachos, a causa de la ausencia de un buen plan de gobierno, no tienen oportunidades para educarse, para encontrar un trabajo digno y, arrojados a las periferias, son posibles reclutas para el crimen organizado y la violencia; estamos hasta la madre porque a causa de todo ello la ciudadanía ha perdido confianza en sus gobernantes, en sus policías, en su Ejército, y tiene miedo y dolor; estamos hasta la madre porque lo único que les importa, además de un poder impotente que sólo sirve para administrar la desgracia, el dinero, el fomento de la competencia, de su pinche “competitividad” y del consumo desmesurado, que son otros nombres de la violencia. 

De ustedes, criminales, estamos hasta la madre, de su violencia, de su pérdida de honorabilidad, de su crueldad, de su sinsentido. 

Antiguamente ustedes tenían códigos de honor. No eran tan crueles en sus ajustes de cuentas y no tocaban ni a los ciudadanos ni a sus familias. Ahora ya no distinguen. Su violencia ya no puede ser nombrada porque ni siquiera, como el dolor y el sufrimiento que provocan, tiene un nombre y un sentido. Han perdido incluso la dignidad para matar. Se han vuelto cobardes como los miserables Sonderkommandos nazis que asesinaban sin ningún sentido de lo humano a niños, muchachos, muchachas, mujeres, hombres y ancianos, es decir, inocentes. Estamos hasta la madre porque su violencia se ha vuelto infrahumana, no animal –los animales no hacen lo que ustedes hacen–, sino subhumana, demoniaca, imbécil. Estamos hasta la madre porque en su afán de poder y de enriquecimiento humillan a nuestros hijos y los destrozan y producen miedo y espanto.

Ustedes, “señores” políticos, y ustedes, “señores” criminales –lo entrecomillo porque ese epíteto se otorga sólo a la gente honorable–, están con sus omisiones, sus pleitos y sus actos envileciendo a la nación. La muerte de mi hijo Juan Francisco ha levantado la solidaridad y el grito de indignación –que mi familia y yo agradecemos desde el fondo de nuestros corazones– de la ciudadanía y de los medios. Esa indignación vuelve de nuevo a poner ante nuestros oídos esa acertadísima frase que Martí dirigió a los gobernantes: “Si no pueden, renuncien”. Al volverla a poner ante nuestros oídos –después de los miles de cadáveres anónimos y no anónimos que llevamos a nuestras espaldas, es decir, de tantos inocentes asesinados y envilecidos–, esa frase debe ir acompañada de grandes movilizaciones ciudadanas que los obliguen, en estos momentos de emergencia nacional, a unirse para crear una agenda que unifique a la nación y cree un estado de gobernabilidad real. Las redes ciudadanas de Morelos están convocando a una marcha nacional el miércoles 6 de abril que saldrá a las 5 de la tarde del monumento de la Paloma de la Paz para llegar hasta el Palacio de Gobierno, exigiendo justicia y paz. Si los ciudadanos no nos unimos a ella y la reproducimos constantemente en todas las ciudades, en todos los municipios o delegaciones del país, si no somos capaces de eso para obligarlos a ustedes, “señores” políticos, a gobernar con justicia y dignidad, y a ustedes, “señores” criminales, a retornar a sus códigos de honor y a limitar su salvajismo, la espiral de violencia que han generando nos llevará a un camino de horror sin retorno. Si ustedes, “señores” políticos, no gobiernan bien y no toman en serio que vivimos un estado de emergencia nacional que requiere su unidad, y ustedes, “señores” criminales, no limitan sus acciones, terminarán por triunfar y tener el poder, pero gobernarán o reinarán sobre un montón de osarios y de seres amedrentados y destruidos en su alma. Un sueño que ninguno de nosotros les envidia. 

No hay vida, escribía Albert Camus, sin persuasión y sin paz, y la historia del México de hoy sólo conoce la intimidación, el sufrimiento, la desconfianza y el temor de que un día otro hijo o hija de alguna otra familia sea envilecido y masacrado, sólo conoce que lo que ustedes nos piden es que la muerte, como ya está sucediendo hoy, se convierta en un asunto de estadística y de administración al que todos debemos acostumbrarnos. 

Porque no queremos eso, el próximo miércoles saldremos a la calle; porque no queremos un muchacho más, un hijo nuestro, asesinado, las redes ciudadanas de Morelos están convocando a una unidad nacional ciudadana que debemos mantener viva para romper el miedo y el aislamiento que la incapacidad de ustedes, “señores” políticos, y la crueldad de ustedes, “señores” criminales, nos quieren meter en el cuerpo y en el alma.